Sí, buena suerte tíos!! esta quizá fue la frase de despedida que más escuchamos en todo el viaje, después de explicarle al nativo de turno la filosófica frase de dónde venimos y a donde vamos, después de un “really?” y algún “fuck” nos despedían con cara de incredulidad y con un buena suerte reflejada en sus caras, pero todo esto empieza un …
… Viernes 18 de Junio de 2010… Santiago de Compostela – Tallin…
… 9 de la mañana y recojo a Martin en casa para ir hasta el aeropuerto, embarcamos nuestras bicis y alforjas en un vuelo de Ryan Air destino Londres – Stansted, todo sin problemas porque el dia anterior habíamos pesado y repesado todo para evitar la poca flexibilidad de esta compañía low cost, aunque la del mostrador ni miró el peso de las cajas ni nada…
... primera escala en el aeropuerto inglés, aprovechamos para comer y dar una vuelta, todo el mundo flipaba con nuestras cajas de bicis, volvimos a facturar en un vuelo de Easy jeat destino Tallin – Estonia, este vuelo fue más largo y pesado, el avión iba lleno de ingleses que se dedicaron todo el trayecto a comer y beber, sobre todo a beber, y gritar como si en vez de en un avión estuvieran en un campo de futbol … aquí conocimos a Marcus, Martin escogió ventanilla, yo pasillo así que a este australiano de metro noventa y unos cuantos kilos no le quedó más remedio que encajarse en el medio, después de dos cervezas y un gin tonic empezó a hablar con nosotros, aun estábamos fríos con esto del inglés, así que nos presentamos como pudimos, le explicamos nuestra aventura y le dimos unas cuantas patadas al Collins English, en el recuerdo quedará siempre un “ I am a bomber man” jaja …
… al llegar a Tallin pedimos a los del aeropuerto “two big boxes with our bikes” y después de esperar aparecen 3 cajas, vaya aquí también hay el 3x2 del Carrefour? ah no, al rato aparece Math, un canadiense que durante tres semanas iba a dar la vuelta a Estonia, sacamos pasta del cajero y a buscar un taxi grande, destino? nuestro Hostel en la ciudad vieja de Tallin que como era peatonal tuvimos que cargar con las cajas un buen tramo, para empezar a calentar todo el cuerpo, dejamos todo en la habitación, y salimos a ver el ambiente, IMPRESIONANTE, y no hablo de los edificios y la parte medieval de la capital estonia, vaya nivel Maribel !! se nos iban los ojos … vamos a cenar que tanta belleza le abre el estómago a cualquiera jajaja … después más paseo y visiones para no dormir, hicimos unas fotos y un poco turismo y nos fuimos a la cama aunque seguía siendo de día, joe con las noches blancas lo que nos costó ...
… al llegar a Tallin pedimos a los del aeropuerto “two big boxes with our bikes” y después de esperar aparecen 3 cajas, vaya aquí también hay el 3x2 del Carrefour? ah no, al rato aparece Math, un canadiense que durante tres semanas iba a dar la vuelta a Estonia, sacamos pasta del cajero y a buscar un taxi grande, destino? nuestro Hostel en la ciudad vieja de Tallin que como era peatonal tuvimos que cargar con las cajas un buen tramo, para empezar a calentar todo el cuerpo, dejamos todo en la habitación, y salimos a ver el ambiente, IMPRESIONANTE, y no hablo de los edificios y la parte medieval de la capital estonia, vaya nivel Maribel !! se nos iban los ojos … vamos a cenar que tanta belleza le abre el estómago a cualquiera jajaja … después más paseo y visiones para no dormir, hicimos unas fotos y un poco turismo y nos fuimos a la cama aunque seguía siendo de día, joe con las noches blancas lo que nos costó ...
… sábado 19 de junio 2010… visitamos Tallin ...
… después de una noche casi en blanco, para que ponen cortinas si la luz pasa igual? que pongan unas persianas como Dios manda digo yo… bueno nos levantamos con ganas de comernos todo lo que se moviese por Tallin jajaja así que empezamos por un copioso y dulce desayuno, de allí a la Plaza Mayor, por el casco antiguo medieval, paseando, haciendo fotos y alegrando la vista…
… nos dio por apuntarnos a una visita guiada pero en el último momento la cambiamos por una visita en bici, el mono nos tiraba ( error de juvenil como dice el sueco, más tarde nos dimos cuenta) y así con guía y en grupo y en unas Trek de paseo a dar vueltas por la ciudad, pillando dos de cada diez palabras que el guía decía en inglés, que parecía un copiloto de rallyes de lo rápido que hablaba, por lo que cuando el resto de la gente se reía, nosotros reíamos, y cuando abrían la boca delante de un edificio nosotros igual, a donde fueres haz lo que vieres jajaja …
… de la visita destacar que nos dieron 5 coronas estonias ( 33 céntimos euro) para comprar lo que quisiéramos en un mercado, nos decantamos por unas tabletas de chocolate, para poco más daba, y la visita a una antigua cárcel, con su muro de ejecuciones incluido …
… tanta bici y tanto inglés nos abrió el apetito así que nos metimos en un restaurante que estaba decorado igual que un barco pirata, la Perla Negra era una chalana al lado de este jeje, y allí conocimos a la guapa Eva (nombre corsario, porque en realidad se llama Jevgenia y es rusa) y que hablaba castellano como si fuera de Albacete, nos recomendó sobre la carta y nos atendió magníficamente, Martin pidió tiburón, sí sí el shark de toda la vida, los tenían en un acuario y de allí a la plancha, estaba caralludo!! yo me conformé con pollo jaja bajo en grasa jaja fiel a mi dieta jaja…
… después de 4 horas en el Korsar hablando y sacando fotos con nuestra pequeña corsaria salimos a la calle y… lloviendo!! joe vaya bajón, seguimos viendo la ciudad abrigándonos por donde podíamos fuimos a descansar un poco y después cena y visita nocturna disfrutando la marcha … kus on pidu?...
… domingo 20 de junio … primer dia de bici, 105 kms …
… después de una noche de agua el día amanece con sol (bueno mas bien no había oscurecido mucho) , nos ponemos la ropa OEA y empezamos a dar pedales, con la brújula apuntando hacia el este salimos de Tallin por carretera nacional y carril bici, pasan los kms y nuestros cuerpos se adaptan a la postura, al sillín, a llevar 15 kgs de peso extra en las alforjas …
… pedaleamos por unas cuantas rectas kilométricas que pensabamos que nunca acababan llegamos a un cruce y echamos una mirada al mapa para ubicarnos, de repente para un coche y se baja un paisano …
Hello guys, where are you going ?
Joe como olía a alcohol, le señalo en el mapa el Parque Nacional de Lahemaa
Ok, it´s a very nice place! Nos indica la carretera a seguir y allá nos vamos ...
Hello guys, where are you going ?
Joe como olía a alcohol, le señalo en el mapa el Parque Nacional de Lahemaa
Ok, it´s a very nice place! Nos indica la carretera a seguir y allá nos vamos ...
Very nice place? Si bueno, después de kms por el dichoso Parque, muy bonito si, muchos árboles, todo muy verde (como aquí más o menos) millones de mosquitos también, que nos comían cuando parábamos a hacer alguna foto, disfrutamos más cuando llegamos a la zona de costa, playa y vistas, pero casi sin casas, gente poca (alguna sí que además fue partícipe de algún video jeje) y ningún sitio para comer, tuvimos que echar mano a la reserva de galletas para mantener las fuerzas, y seguir pedaleando hasta encontrar un pueblo lo suficientemente grande para que tuviera un restaurante, saciamos nuestra hambre de lobos en Loksa y allí volvimos a coincidir con el canadiense Math, con el mapa delante hablamos de donde pensábamos dormir y al final nos decidimos por un pequeño pueblo costero que tenia camping ; Vösu, y para allá nos fuimos, por el camino asistencia técnica a un paisano al que se le había roto la cadena, el tipo quedo flipado con la técnica de Martin jaja …
… llegamos al pueblo y después de dar una vuelta nos fuimos a la playa a refrescarnos, de allí para el camping a montar las tiendas (gracias Ito por prestarme el material) y nuevamente coincidimos con Math que había montado su tienda próxima a la nuestra …
… duchita y paseo hasta el pueblo en las bicis, cena potente amenizada con partido del mundial, charlamos sobre cómo había ido el día y de lo que en principio haríamos la jornada siguiente, poco a poco pasaron de las 12 de la noche y seguía siendo de día, es una sensación extraña, el cuerpo tampoco pide descanso así que paseamos por la playa y tiramos fotos, esa puesta de sol eterna que nunca acaba, ese sol que está horas en el horizonte sin llegar a meterse dio para inmortalizar una de las mejores imágenes del viaje ...
… pero al final, de día o de noche, había que dormir por lo que nos metimos en las tiendas y nos dejamos caer en brazos de Morfeo, hasta que a eso de las 3 de la mañana unos sonidos en la lona me despiertan, estaba lloviendo!! Salgo a recoger la ropa que teníamos tendida y me vuelvo a meter en la tienda, la banda sonora de la lluvia me deja frito otra vez …
… lunes 21 de junio … lluvia, frío y 110 kms …
... despertamos y seguía lloviendo, recogimos todo y nos preparamos para afrontar un día de lluvia, la temperatura era fresca así que para ambas cosas nos abrigamos y después de desayunar empezamos a dar pedales, nos resentíamos de la jornada anterior, hasta que calentamos no fuimos cómodos en las burras, seguía lloviendo y poco a poco nos íbamos calando, llevábamos chubasquero, guantes largos, mallas largas … pero estábamos empapados y con el frio dentro, sobre todo los pies y las manos, el paisaje no ayudaba volvíamos a rodar por carreteras con rectas eternas y siempre llaneando, ni subir ni bajar, que tiene su parte buena pero la mala es que si parabas de pedalear para descansar te quedabas frenado …
… paramos a comer en Rakvere, aprovechamos el baño del restaurante para secarnos y ponernos alguna ropa seca, además improvisamos con unas bolsas un aislante para nuestros pies, aún así teníamos mal cuerpo y como no nos apetecía sufrir fuimos a la estación de autobuses a preguntar cuando salía el próximo hacia el este, 3 horas había que esperar, así que como ya estábamos mejor y parecía que llovía menos decidimos tirar a pedales, pero volvió a llover con intensidad y una nueva mojadura se unió a la pareja OEA …
… paramos en el primer pueblo que encontramos, Jöhvi, llegamos tarde (bueno a las 5 de la tarde cierra todo el comercio), no había nadie en la calle, nos metimos en el único hotel que había, no era gran cosa pero era el mejor, cuatro palabras en inglés porque ya estábamos acercándonos a Rusia y cuanto más cerca menos inglés, ni ganas de entenderse con dos ciclistas empapados…
… abrimos las alforjas y nos encontramos la ropa empapada, había llovido mucho incluso para ellas, intentamos secar la ropa en la lavandería del hotel, pero o no había, o no sabían de lo que les hablábamos, así que montamos un tendedero en la habitación y con un pequeño (diminuto más bien) radiador esperábamos que al dÍa siguiente estuviera seca…
… como era “tarde”, tuvimos que cenar frío, la cocina cerraba a las 21:00 h, así que entre ensaladas y sándwiches vimos como España ganaba 2-0 a Honduras, parece que ya volvemos a tener opciones en el mundial…
… martes 22 de junio… Russia ya está ahí… 60 kms...
... despertamos y la primera imagen que veo es el tendal, casi toda la ropa está seca, bueno parece que el día empieza mejor, aunque fuera sigue lloviendo, así que desayunamos y bajamos a un centro comercial cercano a comprar un chubasquero mejor que el que teníamos, nos pillamos unos Columbia con rebajas al 50%, eso sí, color y talla los que había que para eso eran de rebajas jajaja…
… con nuestros nuevos aislantes salimos a la carretera, un par de horas de pedal y hacemos parada técnica en un bareto un poco lúgubre y vuelven los problemas de idioma, el paisano que estaba detrás de la barra poco mas decía de Hello, pero como era un tipo muy servicial coge y llama por teléfono a su hermana que vivía en Tallin y hablamos con ella en inglés para pedir las consumiciones y luego ella se lo traduce al estonio… surrealista pero efectivo…
… otra vez en ruta, seguía lloviendo y llegan los primeros problemas técnicos, pinchazo de Martin, se repara y a los 500 metros otra vez pinchado, un cristal clavado en la cubierta… llegamos a Narva, ciudad fronteriza con Russia y antes de cruzar al otro lado nos sentamos a comer y luego damos una vuelta como despedida a Estonia, en el paseo nos encontramos al canadiense Math que iba caminando, le habían robado la bici en el hotel!! Vaya putada!! Así que se iba a coger un bus para ir a Tartu y comprar otra … joe que cuidado hay que tener …
… bueno, la frontera, allá vamos, colas para salir de Estonia, me miran y remiran el pasaporte, me miran y remiran a mí, otra vez, al final parece que mi sonrisa de niño bueno casi les convence y me dejan pasar, cruzamos a pie el río Narva y llegamos al control de Russia, otra vez colas, como no se podían hacer fotos ni videos nosotros las hicimos, que no sabíamos cuando íbamos a volver jaja … cubrimos el papelito para entrar, enseñamos los visados, casi ni nos miran a la cara, las bicis y las alforjas pasan como si nada pitando todo lo posible bajo el detector de metales … un poco decepcionante esta entrada en el ex comunismo, ni un triste soldado con perro para meter un poco de miedo …
… ala, ya estamos en Ivangorod, ya pisamos tierra rusa, entre los dos controles, bueno más bien entre las colas de los dos controles perdimos más de dos horas, para hacer 500 metros, vaya media ! jaja … así que como volvía a ser tarde decidimos quedarnos en este pueblo fronterizo, y si en los últimos pueblos de Estonia habíamos tenido problemas con el idioma aquí se multiplicaban, además había que sumarle lo del alfabeto cirílico:
“Ahí que pone?… Uh… palito, B, cuadrado o algo parecido, una A y después una letra que no se cual es … “
… ánimo que somos OEA …
… damos unas vueltas buscando un hotel, nos mandan a un edificio que se cae a trozos, ventanas caídas, vamos que la casa de la familia Monster era el Ritz al lado de esto, no nos convence y le preguntamos a la Policía Militar, mucho jiji, mucho jaja, pero ni papa de lo que decían, así que con un “ spasiva” nos despedimos de los uniformados y seguimos dando vueltas , en un callejón vuelve a aparecer el coche militar y uno nos dice que les sigamos que hay otro hotel, bueno de perdidos al río, nos meten por unas pistas de tierra, puro MTB jaja, y después de un rato llegamos a otro hotel, se baja un uniformado y se pone a chapurrear en inglés, vaya que bien, que de donde éramos y demás … y de repente se pone a chapurrear en castellano, hay que joderse! … el tío había estado dos años en Cuba destinado jaja como premio nos dijo (ya me imagino que no lo pasó nada mal) jaja, así que entre un idioma y el otro nos despedimos no sin antes darle unos rublos para que se tomaran unas cervezas …
… la dueña del hotel parecía una de las Chicas de Oro, y su conocimiento de inglés era menos que cero, así que al final decidimos pasar de hacernos entender porque nosotros en inglés, ella en ruso, no íbamos a ningún lado, sacamos el diccionario de gestos y zafamos, pillamos habitación, y a la hora de cenar señalamos a rumbo en la carta la pizza que queríamos, porque ni idea de lo que ponía …
… al guardar las bicis descubrimos un radio roto en la rueda trasera de Martin …
… lunes 21 de junio … lluvia, frío y 110 kms …
... despertamos y seguía lloviendo, recogimos todo y nos preparamos para afrontar un día de lluvia, la temperatura era fresca así que para ambas cosas nos abrigamos y después de desayunar empezamos a dar pedales, nos resentíamos de la jornada anterior, hasta que calentamos no fuimos cómodos en las burras, seguía lloviendo y poco a poco nos íbamos calando, llevábamos chubasquero, guantes largos, mallas largas … pero estábamos empapados y con el frio dentro, sobre todo los pies y las manos, el paisaje no ayudaba volvíamos a rodar por carreteras con rectas eternas y siempre llaneando, ni subir ni bajar, que tiene su parte buena pero la mala es que si parabas de pedalear para descansar te quedabas frenado …
… paramos a comer en Rakvere, aprovechamos el baño del restaurante para secarnos y ponernos alguna ropa seca, además improvisamos con unas bolsas un aislante para nuestros pies, aún así teníamos mal cuerpo y como no nos apetecía sufrir fuimos a la estación de autobuses a preguntar cuando salía el próximo hacia el este, 3 horas había que esperar, así que como ya estábamos mejor y parecía que llovía menos decidimos tirar a pedales, pero volvió a llover con intensidad y una nueva mojadura se unió a la pareja OEA …
… paramos en el primer pueblo que encontramos, Jöhvi, llegamos tarde (bueno a las 5 de la tarde cierra todo el comercio), no había nadie en la calle, nos metimos en el único hotel que había, no era gran cosa pero era el mejor, cuatro palabras en inglés porque ya estábamos acercándonos a Rusia y cuanto más cerca menos inglés, ni ganas de entenderse con dos ciclistas empapados…
… abrimos las alforjas y nos encontramos la ropa empapada, había llovido mucho incluso para ellas, intentamos secar la ropa en la lavandería del hotel, pero o no había, o no sabían de lo que les hablábamos, así que montamos un tendedero en la habitación y con un pequeño (diminuto más bien) radiador esperábamos que al dÍa siguiente estuviera seca…
… como era “tarde”, tuvimos que cenar frío, la cocina cerraba a las 21:00 h, así que entre ensaladas y sándwiches vimos como España ganaba 2-0 a Honduras, parece que ya volvemos a tener opciones en el mundial…
… martes 22 de junio… Russia ya está ahí… 60 kms...
... despertamos y la primera imagen que veo es el tendal, casi toda la ropa está seca, bueno parece que el día empieza mejor, aunque fuera sigue lloviendo, así que desayunamos y bajamos a un centro comercial cercano a comprar un chubasquero mejor que el que teníamos, nos pillamos unos Columbia con rebajas al 50%, eso sí, color y talla los que había que para eso eran de rebajas jajaja…
… con nuestros nuevos aislantes salimos a la carretera, un par de horas de pedal y hacemos parada técnica en un bareto un poco lúgubre y vuelven los problemas de idioma, el paisano que estaba detrás de la barra poco mas decía de Hello, pero como era un tipo muy servicial coge y llama por teléfono a su hermana que vivía en Tallin y hablamos con ella en inglés para pedir las consumiciones y luego ella se lo traduce al estonio… surrealista pero efectivo…
… otra vez en ruta, seguía lloviendo y llegan los primeros problemas técnicos, pinchazo de Martin, se repara y a los 500 metros otra vez pinchado, un cristal clavado en la cubierta… llegamos a Narva, ciudad fronteriza con Russia y antes de cruzar al otro lado nos sentamos a comer y luego damos una vuelta como despedida a Estonia, en el paseo nos encontramos al canadiense Math que iba caminando, le habían robado la bici en el hotel!! Vaya putada!! Así que se iba a coger un bus para ir a Tartu y comprar otra … joe que cuidado hay que tener …
… bueno, la frontera, allá vamos, colas para salir de Estonia, me miran y remiran el pasaporte, me miran y remiran a mí, otra vez, al final parece que mi sonrisa de niño bueno casi les convence y me dejan pasar, cruzamos a pie el río Narva y llegamos al control de Russia, otra vez colas, como no se podían hacer fotos ni videos nosotros las hicimos, que no sabíamos cuando íbamos a volver jaja … cubrimos el papelito para entrar, enseñamos los visados, casi ni nos miran a la cara, las bicis y las alforjas pasan como si nada pitando todo lo posible bajo el detector de metales … un poco decepcionante esta entrada en el ex comunismo, ni un triste soldado con perro para meter un poco de miedo …
… ala, ya estamos en Ivangorod, ya pisamos tierra rusa, entre los dos controles, bueno más bien entre las colas de los dos controles perdimos más de dos horas, para hacer 500 metros, vaya media ! jaja … así que como volvía a ser tarde decidimos quedarnos en este pueblo fronterizo, y si en los últimos pueblos de Estonia habíamos tenido problemas con el idioma aquí se multiplicaban, además había que sumarle lo del alfabeto cirílico:
“Ahí que pone?… Uh… palito, B, cuadrado o algo parecido, una A y después una letra que no se cual es … “
… ánimo que somos OEA …
… damos unas vueltas buscando un hotel, nos mandan a un edificio que se cae a trozos, ventanas caídas, vamos que la casa de la familia Monster era el Ritz al lado de esto, no nos convence y le preguntamos a la Policía Militar, mucho jiji, mucho jaja, pero ni papa de lo que decían, así que con un “ spasiva” nos despedimos de los uniformados y seguimos dando vueltas , en un callejón vuelve a aparecer el coche militar y uno nos dice que les sigamos que hay otro hotel, bueno de perdidos al río, nos meten por unas pistas de tierra, puro MTB jaja, y después de un rato llegamos a otro hotel, se baja un uniformado y se pone a chapurrear en inglés, vaya que bien, que de donde éramos y demás … y de repente se pone a chapurrear en castellano, hay que joderse! … el tío había estado dos años en Cuba destinado jaja como premio nos dijo (ya me imagino que no lo pasó nada mal) jaja, así que entre un idioma y el otro nos despedimos no sin antes darle unos rublos para que se tomaran unas cervezas …
… la dueña del hotel parecía una de las Chicas de Oro, y su conocimiento de inglés era menos que cero, así que al final decidimos pasar de hacernos entender porque nosotros en inglés, ella en ruso, no íbamos a ningún lado, sacamos el diccionario de gestos y zafamos, pillamos habitación, y a la hora de cenar señalamos a rumbo en la carta la pizza que queríamos, porque ni idea de lo que ponía …
… al guardar las bicis descubrimos un radio roto en la rueda trasera de Martin …
… miércoles 23 de junio, en autobús a San Petersburgo …
… nos levantamos al ritmo del himno ruso, que va es coña, nos levantamos con Moby & Amaral, gentileza del móvil de Martin, ese “Escapar” parecía una misión imposible jaja …
… desayuno tradicional ruso, 3 huevos fritos con pan y mantequilla, puro colesterol pero bueno era lo que había, mientras engullíamos decidimos que con el radio roto no podíamos hacer los 145 kms que nos separaban de San Petersburgo, y encontrar una tienda de bicis en Ivangorod era pedir demasiado así que venga, nos vamos en tren … y buscamos, y buscamos, y dimos con las vías, y si por aquí, y si por allí, y al final después de más de una hora encontramos la estación, ni dios, desierta, un par de militares, unos carteles que no nos decían nada, nadie nos hacía caso y nosotros esperando a ver si aparecía alguien, nada de nada, al final nos informan que de esa estación solo salen trenes para Moscú, que para ir a San Piter sólo hay autobús, pues ale, a la estación de bus, o lo que fuera aquello, gente esperando, nosotros con la bici, no llegaba ningún bus, algún taxi comunitario hacía carga y descarga, pasaba el tiempo y llega el bus, baja gente, le preguntamos al busero y no nos entiende pero poniendo las manos debajo de la oreja nos indica que se va a dormir … a joderse, viva Russia!! …
… seguimos esperando, no podíamos hacer otra cosa, y al final llega otro busero y nos deja meter las bicis y pagamos el viaje, pero bueno aun así tardamos más de media hora en salir, pero lo conseguimos, el tractor-autobús empezó a moverse y a comerse los kms que nos separaban de la antigua Leningrado …
… después de un par de siestas en el bus llegamos a San Petersburgo, de la estación al hostel en bici y una vez allí desembarcamos y empezamos a conocer la ciudad y de paso buscar una tienda de bicis donde nos cambiaran el radio y centraran la rueda, encontramos dos pero eso de centrar no iba con ellos, así que pillamos un extractor de casetes y alguna pieza más(que yo no tengo ni idea como se usan) para reparar la rueda, para el centrado Martin apañó un novedoso sistema, que nos ayudo a salir del paso …
… y del paseo qué? Pues decir que las primeras impresiones de la ciudad, o más bien de las nativas de la ciudad fueron excelentes, sin pretender que suene machista, mujeres como aquellas no las hay aquí (bueno, vale alguna hay pero no tantas jaja ), guapísimas, altas, súperarregladas, mini faldas, superescotes, bueno y taconazos sobre los que se movían como si fueran en planos, una gozada para los sentidos caballeros!! jajaja …
… jueves 24 de junio … visitamos San Petersburgo …
... cambiamos el uniforme de bici por el de turista y mapa en mano recorrimos los monumentos (los arquitectónicos, no los de dos piernas … mal pensados) de la ciudad, desde la Plaza Vosstiana y la estación de Moscú, por la gran Avenida Nevsky fuimos bajando en dirección al río Neva, por la animada avenida iban pasando hoteles, cafeterías, comercios y mucha mucha gente, ya en si la avenida es espectacular solo por la vida que tiene …
… la Catedral de Kazán, un gran centro comercial muy chulo al que bautizamos como el Harrods de San Petersburgo, unos jardines y llegamos al monumento más característico de la ciudad, La Iglesia de la Sangre Derramada o de la Resurrección, la verdad es que es preciosa y vale la pena quedarse un rato largo a contemplarla y entrar a ver los mosaicos y las pinturas del interior…
… seguimos, paso a paso, foto a foto, hacia la Plaza del Palacio y el Ermitage, que viene siendo un museo inmenso que nos conformamos con ver desde fuera, cruzamos uno de los puentes del Neva y pasando por delante del Museo de la Marina llegamos a la Fortaleza de San Pedro y San Pablo, más turismo, más fotos curiosas y como nos entraba el hambre buscamos restaurante no sin antes detenernos en la mezquita más grande de la ciudad, todo azulejos azules …
… atravesamos los campos de Marte, en honor al dios de la guerra y acabamos en un restaurante a descansar, comer con té y de postre un daiquiri en honor del maestro González ( la camarera flipaba con mis peticiones jaja) y a resumir la mañana y planificar la tarde, había que hacer algunas compras y allá nos fuimos de mercadillo pero la verdad es que a excepción de la estrella roja de cinco puntas que quería Martin no sacamos nada, todo muy normalito, nada que me llamase la atención, miles de matriuscas de varios colores y tamaños, con caras de personajes conocidos y poco más, alguna camiseta de mala calidad (con letras en inglés, no en ruso, las entenderían?) así que con gran decepción dejamos la zona, los únicos recuerdos que nos llevaríamos de Russia serían las fotos y las experiencias, que no es poco …
… a última hora de la tarde, antes de cenar, exploramos el metro, cada estación es un palacio en miniatura, un templo, con sus mármoles, sus bronces, sus estatuas, cogimos la línea azul y bajábamos en cada parada a tirar fotos, y después volvíamos a subir , y así unas cuantas, entre el va y viene tuvimos unos momentos de duda, de si nos habíamos equivocado al subir la ultima vez y si íbamos mal, falsa alarma, pero el metro estaba a punto de cerrar y no queríamos quedarnos colgados …
… cenamos en un árabe o algo parecido y volvimos al hostel a buscar las bicis, para bajar otra vez al Neva a ver como se abrían los puentes de noche para que pasaran los barcos, recorrimos de nuevo la avenida Nevsky pero esta vez con las burras y las luces a todo trapo, hicimos nuestra particular nocturna por San Petersburgo …
…vaya expectación, los márgenes del rio a reventar de gente, en el río barcos con pasajeros para ver el espectáculo, candamos las bicis a una farola y cogimos un buen sitio para ver como se abría el puente del Palacio y como después pasaban los grandes barcos …
… seguimos con la nocturna, conocimos a unos de Bilbao y fue curioso comprobar como lo que nos llevó ver casi todo el dia lo vimos en un par de horas en la bici, grabando videos “ on board” y sacando foto tras foto …
… eran cerca de las 3 cuando volvimos al hotel, dentro de unas horas había que volver a pedalear …
… viernes 25 de junio, buscando Finlandia … 40 kms …
… no madrugamos mucho, después de trasnochar cedimos a la tentación de un poquito más y cuando por fin nos levantamos el ruido de la lluvia nos hizo espabilar, ala otra vez a mojarse! desayunábamos y mirábamos por la ventana, no paraba, era tormenta y caía con ganas, joe otra vez! bueno pues nada, decidimos salir de San Petersburgo en tren, nos esperaban 140 kms hasta la siguiente parada que era Vyborg, decidimos empezar en tren y cuando nos apeteciese bajarnos y seguir en bici …
… llegamos a la estación de Finlandia, entre un poco de inglés y unos dibujitos en un papel conseguimos cuatro billetes (dos para nosotros y dos para las bicis) y nos vamos al andén, el tren iba a tope, nuestro vagón lleno de militares, los asientos de madera madera, casi era mejor el sillín de la bici, pongo el GPS para calcular la distancia y veo que el tren lleva una media de 40 km/h así no llegamos ni mañana jaja casi que voy por la flaca y hago un tras- tren jaja …
… cuando llevamos unos 100 kms nos bajamos, en medio de la nada, una estación y lo que se suponía una carretera, carretera era, porque en el mapa venia, pero era de barro, el asfalto no lo conocían por aquí, pero los coches y los camiones pasaban como si fuera una autopista, cuidadín cuidadín OEA´s…
… al fin llegamos a una carretera de verdad, con indicadores y todo, íbamos por buen camino, había dejado de llover e incluso hacia buena temperatura, estábamos llegando a Vyborg cuando nos quedamos con la boca abierta al pasar al lado de … un cementerio? sí o camposanto, no sé, cientos de tumbas en un pinar al lado de la carretera, todas con flores y lápidas labradas, nada los separaba de la carretera, ni un muro, ni una verja, un camino de entrada y por el nos metimos, la verdad es que era sorprendente, pero allí debe ser lo normal…
… seguimos hasta Vyborg, entre que si acampamos o buscamos hotel la decisión la tomaron unas nubes negras que no tardaron en descargar, nos fuimos a un hotel donde nos tocó la rusa más borde del mundo, además de gilipollas, ni papa de inglés y atendía una recepción de hotel!! nos mandaba guardar las bicis en un parking al aire libre, y un huevo yo me la subo para la habitación, mi borrica duerme conmigo … menos mal que vino un chaval que debía ser botones o algo así y con cuatro palabras nos arregló todo, nos faltó hacerle un corte de manga a la panocas de recepción …
… fuimos a dar un paseo por el pueblo, nos gustó, tenia detalles que no esperábamos encontrar, luego nos fuimos a cenar y ver como España ganaba a Chile y pasábamos a octavos…
... sábado 26 de junio, ciao Russia… 150 kms…
… entre una cosa y la otra llevábamos 3 días en los que habíamos cogido la bicicleta muy poco, así que ya era día de poner las piernas a funcionar, y darnos un poco de caña, y vaya si la llevamos…
… nos separaban 60 kms de la frontera con Finlandia, al igual que en toda Rusia y en parte de Estonia, pasamos muchos kms sin ver una casa ni una cara, sólo coches, carretera y árboles a los lados, esta última parte de Rusia fue igual, por dentro, y por fuera porque lo comentábamos, teníamos ganas de llegar a un país que esperábamos fuera más hospitalario y más agradable para el ciclista, poco a poco nos acercamos a la frontera, quedaban 10 kms y pasamos el primer control de pasaportes, un rato después otro más, y otro justo antes de Finlandia, nada de fotos aunque antes de que nos echaran la bronca Martin sacó alguna, jaja, mira que si nos llevan para el calabozo …
… y sí, por fin entramos en Finlandia, control de frontera sin problemas para ciclistas, ahora los autobuses y algunos coches casi los desmontaban, sacaban maletas, miraban fondos… nosotros enseñamos el pasaporte, sonreímos y Welcome to Finlandia!! …
… y lo primero que nos recibe son casas, con gente y un carril bici, con ciclistas, en definitiva, vida … llegamos a un cruce y abro el mapa para ubicarme, aparece un paisano corriendo y ofreciéndonos ayuda, le preguntamos por un cajero y el nos lleva hasta uno, el corriendo, nosotros en la bici, nos dedica unas palabras en castellano porque había estado trabajando en Gran Canaria, nos despedimos y me voy al cajero a sacar “ coronas finlandesas”, pero el cajero solo me da opción de euros …
… oye Martin, que moneda hay aquí? Que esto me da euros … Ni idea, me dice
… en esto llega un coche con gente a sacar pasta, baja uno y le pregunto si la moneda de Finlandia es el euro y me dice que si jajaja vaya risas, y nosotros buscando coronas finlandesas jaja
… comemos en Virolanti en la terraza de un bar muy animado, creamos un poco de expectación al llegar con nuestras bicis y el uniforme OEA, seguimos pedaleando, por carreteras secundarias y por carril bici, de vez en cuando veíamos el mar y pequeños pueblos, los otros ciclistas que nos encontrábamos nos saludaban, otro país, otro mundo …
… km a km llegamos a Kotka, nuestra meta del dia, pero nos recomendaron un camping en Mussalo, una isla que es parque natural y allá nos vamos, hacemos unos kms más y llegamos a la recepción del camping …
Hello,
Hello,
We want a place for two small tents
Ok, 60 € for person
Eh? Cómo? A ver que esta no nos entendió, y repetimos, y ella que si pero que 60 € por persona, que era un camping Five stars y no sé que mas, vamos que ni de coña pagamos 120 € por dormir en el suelo por muy Five stars que sea y este en un parque natural, así que cogemos una guía de hoteles y nos vamos al que mejor pinta tiene y que está en el centro de Kotka, pagamos 110 € bien a gusto por una habitación muy amplia, moderna y con desayuno, cenamos en la habitación viendo como el tercer mundo gana al ombligo del mundo, Ghana – USA , 2-1, los yanquis para casa …
… domingo 27 de junio, llegamos a Helsinki … 145 kms …
… nos pegamos una paliza desayunando, tripitimos y cuatripitimos la visita al buffet, nos reimos mientras pensábamos que si estuviésemos en el camping Five stars estaríamos recogiendo las tiendas, paradojas de la vida …
… salimos de Kotka acompañados de Martin , un tocayo de nuestro OEA bombero que nos ayudó a salir de la ciudad (porque de tanto carril bici que hay hasta te pierdes) y que nos ratifica la idea de que en este país la gente es mucho más amable y sociable, rodamos y rodamos haciendo 95 kms antes de comer, llegamos a Poorvo con un hambre de lobos, así que nos dejamos caer en el paseo fluvial y en una terraza llenamos el estomago y luego nos vamos a la zona vieja a tomar un café, té y tarta de chocolate para reponer energías …
… nos quedaban 55 kms, así que vuelta a la carretera, ponemos música en el móvil y subimos el ritmo, y lo subimos de verdad, verdad Martin? dándolo todo por llegar lo antes posible, y llegamos pero por un error de logística no teníamos mapa ni la dirección del Hostel, así que entre preguntar y por sentido de la orientación llegamos al centro de Helsinki donde nos encontramos con tres de San Sebastián y hablando nos pasan casi dos horas, Martin consigue la dirección del Hostel y para allá nos vamos, guardamos las bicis en un cuarto y descubro un radio roto en la rueda trasera de mi borrica, a saber cuando rompió, salimos a dar una vuelta y a cenar …
… lunes 28 de junio, visitamos Helsinki…
… y visitamos, y conocimos La Catedral, la Plaza del mercado, el paseo Esplanadi, la Catedral Uspenski, la Estación del Ferrocarril, el puerto viejo … pateamos a conciencia, nos gustó Helsinki, la vida que tiene, lo amable que es la gente, y parábamos en las tiendas decoración, el diseño Escandinavo nos tiraba mucho, hicimos algunas comprillas aunque no muchas porque nos condicionaba el espacio de las alforjas y el peso, pero aún así me hice con mi porquiño con alas, que me embalaron para que pudiera soportar el viaje de vuelta …
… y después de comer más paseo, entramos en un centro comercial y vimos una exhibición de cheerleaders, nos quedamos un rato a disfrutar de las coreografías y luego nos fuimos a cenar y a descansar …
… martes 29 de junio, googbye Helsinki …
… 180 kms nos separaban de Tampere, ciudad al norte de Helsinki de la cual salía nuestro vuelo de vuelta a casa, otro radio roto y con más ganas de ser turista que ciclista decidimos dar descanso a las borricas y hacer esa distancia en tren, así que allá nos vamos para la Estación, sacamos billetes para nosotros y las bicis (no lo había dicho hasta ahora pero que sepáis que Finlandia es muy muy cara, no sé como andarán los sueldos pero los precios de las cosas están por las nubes y más arriba ) y nos subimos a un tren de última generación, a velocidades de 140 km/h y casi sin percibir ningún ruido exterior (lo que me llevo a pegarme una buena cabezada) llegamos a Tampere …
… encontramos el Hostel y nos impresionó, nuevo, muy moderno y con la sonrisa de Anna detrás del mostrador para ayudarnos en todo lo que necesitamos, incluso dejamos nuestra foto y firma en el libro de huéspedes … después de comer nos dedicamos a explorar la ciudad, nos sorprendió, esta antigua ciudad industrial en la que reformaron las fabricas en viviendas y centros comerciales, nos encantó, la recorrimos en bici y la disfrutamos como no habíamos pensado …
… también nos dio tiempo buscar una tienda de bicis donde nos vendiesen unas cajas para poder llevar las nuestras en el avión, por 20 € conseguimos la pareja y de vuelta para el hostel, cenamos y salimos a ver como España ganaba a Portugal, en un pub inglés, a un lado los de la roja, al otro los portugueses, en medio finlandeses y otras nacionalidades, se sufrió pero pasamos a cuartos …
…. miércoles 30 de junio, esto se acaba amigos …
… no madrugamos, no lo necesitábamos, dedicamos la mañana a embalar las bicis y después salimos a comer hasta que el taxi – furgoneta nos vino a recoger para llevarnos al aeropuerto, pasamos, bueno más bien pase algún problema a la hora de embarcar por el número de bultos de mano, pero nada, con un poco de ingenio me adapté a las normas y para adentro, volamos hasta Frankfurt, llegamos con casi todo cerrado, cenamos como pudimos pero bien y nos echamos a dormir en unos bancos hasta el día siguiente que nuestro vuelo salía a las 06:30 de la mañana, también tuvimos problemas a la hora de facturar las bicis, nos pasábamos 20 kgs del peso permitido, pero bueno otra vez la cabeza y el ingenio OEA nos hizo salir del apuro, eso sí pagando 40 € ( pero bueno, mejor que los 400 que nos querían hacer pagar al principio) y así entre el cansancio, el repaso a todos los días de viaje, recordando las experiencias acumuladas llegamos a Santiago de Compostela en la mañana del 1 de julio …
muchas risas y mucha música
martín & dabiz
PD:ALBUM DE FOTOS EN MI FACEBOOK:
http://www.facebook.com/album.php?aid=2054277&id=1174077668
9 comentarios:
la verdad Dabiz que me dabas miedo doce dias, 288 horas de esperiencias irrepetibles, me decia para mi, este hombre debe escribir "algo" menos que el libro gordo de Petete, pero gracias por hacernos llegar al viaje y hacernos sentir como si estuvieramos con vosotros disfrutando del viaje
GRACIAS
jaja pues a base de resumir y resumir quedo asi, que por escribir vamos, solo es ponerse, y fotos joe, mas de 700 y videos, pero eso ya iran en un album del faccebook
me alegro que te haya gustado
menuda viaxe, mola o tendal da roupa na habitación e o parque movil dos rusos, ¿pero quedo ca duida se vos bañastes na praia que tivestes que percoller 500 mts. para que vos dese a auga polas rodillas?
un saudo e felicidades polo voso viaxe
por fin o lin todo con calmae disfrutando. sólo podo decir que canto máis leo estas cousas, máis ganas me dan a min de ir a unha carallada destas!! (al tiempo...)
Enserio, noraboa polo reto que o merecedes, ainda que houbo máis festa da que eu pensaba! cal será a proxima? dios dirá!
Dabiz... espero que puedas estar para carballo cabron!
jaja la playa era toda asi, si seguimos corriendo llegamos a finlandia jaja, nos conformamos con sentarnos y mojar el culo jaja
oscarito, ya sabes, a meter euros en la hucha que para el año se programo otro sin problema, ademas no se de que te extraña lo de la carrallada, despues de Ponferrada y los soplaos uno tiene que mantener el nivel no? jaja no todo va a ser dar pedales ...
Carballo, carballo, carballo ... joe si yo os contara ...
ah y de mis pegatas ya no te pregunto jajaja
oye ¿ese que sale en el video es el bicho ese de national geografic que corre por encima del agua? jaja
enhorabuena por la aventura, rapaces
alegrome de q todo os saira ben .oimportante e disfrutar
joer mira que tivechedes aventuras eh mimahhh ajajjaja
Non sei eu se daría aguantado....menos mal que sempre vos quedou o tren...quedastes cheos del...ajjaja
INCRIBLE VIAXE E INCRIBLE CRÓNICA.
FELICIDADES ÓS DOUS¡¡
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