DUATLON CANDEAN; ABANDONO.

El título ya lo dice todo, así que me podría ahorrar la crónica pero bueno, salvando la larga distancia todos los que hemos leído “Crónica de una Muerte Anunciada” del gran García Márquez sabíamos desde el principio que se iban a cargar al pobre Santiago (al que no lo haya leído ya sabe lo que hay) así que aunque la cosa no dio para mucho resulto ser así…
… Monte Vixiador, Candeán (Vigo) sábado 13 por la tarde, buen tiempo y poco más de 100 duatletas para tomar la salida, los típicos 5 km a pie, 20 en bici y 2,5 a pie para rematar la faena, todo por caminos y pistas, un OEA con el dorsal 35 y algo de nervios propios de la carrera …
… bocinazo y a dar zapatilla, salgo fuerte, los entrenos previos me hacían ser optimista y un poco osado así que excepto a los 3 galgos que se ponen en cabeza nada más empezar me uno a un grupo perseguidor, repecho para arriba, repecho para abajo, llanear… terreno más o menos fácil, alguna piedra y ramas, ir con cuidado y apretando fuerte…
… acabo el primer sector en 17min 25seg, voy bien, entro el 14 a hacer la transición, salgo en el aire (como se notan los entrenos!!) y en los primeros kms ya paso a un par de rivales, primeros repechos y alguno más cae, tengo un grupo delante de 3 que van muy fuerte pero antes del final de la primera vuelta los alcanzo, ya estoy entre los 10 primeros, ahora a aguantar la siguiente vuelta para rematar lo más fuerte posible en la última …

... bueno esto eran las cuentas de la lechera, aquella que se le rompió el cántaro y se quedó sin nada, a mi más o menos, acabando la primera vuelta, después de formar grupillo, en un descenso hago un pequeño salto (y vosotros amigos OEA que conocéis mis dotes bajadores podréis imaginaros que el salto era pequeño para que yo lo hiciese jaja) y oigo un “crak” en el asiento, pensé que lo había partido, pero me siento para hacer una zona de curvas entre arboles y sólo oigo que se repite el sonido, pero todo parece bien, me pongo de pie para subir una rampa y cuando me vuelvo a sentar para iniciar el descenso … ay!! Que me voy para atrás!! Había partido la tija? Paro, miro, una pieza de la tija se ha salido, el sillín apunta al cielo, lo intento arreglar, no puedo, decido seguir a ver…
… hago mas de 3 km de pie, sin poder sentarme, aunque el cuerpo me lo pedía en algunas zonas, reventándome vivo la verdad, hasta que en una zona de control un juez árbitro “me recomienda” abandonar, por seguridad, bueno la verdad es que casi me hizo un favor, me jodió muchísimo pero hay veces que no se puede por mucho que se quiera…
… y así, fin a la experiencia de los duatlones de montaña…. ahora a seguir entrenando, para Abril los de carretera…

Muchas risas y mucha música
dabiz